Concepción
Perea nos muestra un espléndido universo a veces barroco, a veces
intimista, siempre rebosante de imaginación y repleto de acción e
intriga a raudales. Acercándose a modelos más cercanos a George R.
Martin en el que nadie es todo lo que parece y todos tienen secretos
ocultos pero que son pilares básicos para la historia que se narra.
La
protagonista, Nicasia, es una continua caja de sorpresas a lo largo
de la novela, y hasta el final te mantiene la tensión e intriga sin
darte tiempo a respirar. Cada capítulo es una montaña rusa que
crece y crece, te vuelve loco, gruñes cuando crees ver el final y te
encuentras con una nueva historia igual o más adictiva que la que
has dejado atrás…
Han
sido las 664 páginas que más he disfrutado de toda Semana Santa. No
pude abandonar su lectura hasta que conseguí llegar al final… un
final tan abierto que me huelo una continuación… Sí, sí. Yo
quiero más y más, y mucho más…
Ya
le he reservado para las relecturas veraniegas en la piscina. ¿Qué
hacéis que no estáis comprándolo ya? Vamos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario