Este libro me ha recordado mucho a su trilogía de Marte por la temática tan ambiciosa que toca.
Reconozco me ha sido difícil leer las 448 páginas de este lirbo que a veces brilla de manera mágnífica y otras se muestra como confuso y sin sentido. El manejo de los personajes es el punto fuerte en todas sus obras y en éste sin llegar a ser una obra maestra se maneja con soltura. Quizás el personaje que se muestra más confuso y difícil de seguir en su evolución es la computadora. La idea y el argumento están muy cuidados en todos los aspectos y de la parte técnica no puedo decir nada. Mis conocimientos sobre matemática orbital y esas cosas están muy por debajo del nivel necesario para seguir sus explicaciones.
Donde más falla esta novela es en intentar comprimir tanta información y sucesos en pocas páginas. La evolución es en general es demasiada rápida y peca de confusa muchas veces. Parece como si la novela fuera a saltos. Como escenas sueltas de una película. Para mi gusto es una buena novela pero debería haber aprovechado mejor los personajes y desarrollado la línea argumental con más tranquilidad. Una novela sobre esta temática tal y como él suele escribir podía haber dado casi para una segunda trilogía tan excelente como la de Marte.
Me dejó un regusto amargo por las posibilidades perdidas en esta novela.