Es difícil de clasificar esta novela. Ante todo y sobre todo es una grandísima ópera bufa divertida a la vez que satírica. David Brin, su autor, utiliza la excusa de un viaje a otra dimensión en el que el segundo principio de la termodinámica funciona del revés: cualquier objeto mejora con el uso en lugar de sufrir desgaste y estropearse.
Con sinceridad. Es una de esas novelas que me gusta repasar de tanto en cuanto. Es ligera, divertida, sin pretensiones pero escrita con elegancia y repleta de sátira hacia las grandes aventuras de la ciencia ficción de las novelas pulm (Flas Gordon, John Carter,etc.) que por momentos no puedes evitar carcajearte por las situaciones en las que se encuentra el protagonista.
El libro lo conseguí en una feria del Libro Usado hace ya años, y supongo que puede ser difícil de pillar, pero es recomendable para desintoxicarse de novelas serias y abstrusas. Además, su autor tiene una recomendable cantidad de novelas en ciencia-ficción que tendré que ir comentaros más adelante.
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